jueves, 2 de abril de 2015

6. ROPAS Y VESTIDO

- Al nacer el bebe pasa de un medio líquido en el que estuvo sumergido por varios meses (como un pez en el agua) a un medio gaseoso (aire ambiente). Le ocurre como cuando usted sale de una piscina y ha estado mucho tiempo sumergido en agua. Al salir y exponerse a las corrientes de aire del medio ambiente, usted siente frío. Al bebe le pasa igual, por tanto debe estar muy bien abrigado durante las primeras 24 hrs de vida.

- En climas tropicales y cálidos como el nuestro, se debe tener cuidado de no prolongar el exceso de abrigo más allá de este tiempo, porque la piel se seca y este fenómeno desaparece; no es raro encontrar que  muchos niños son posteriormente hospitalizados porque presentan fiebre en los primeros 5 días de vida; luego de múltiples exámenes y antibióticos innecesarios, finalmente se concluye (casi siempre después de 3 días de hospitalización) que la fiebre no era por infección sino por calor del medio ambiente, exceso de abrigo y deshidratación.

- No use cobertores gruesos (son para tierra fría). Use los delgados de algodón suave.

- En general en nuestro clima (temperatura media de 27 a 30°C), un bebe estando en el interior de una casa en un día normal no necesita más que una camiseta esqueleto de algodón, un pañal y unas medias. En una noche normal con una pijama enteriza adicional es suficiente. Cambie la cantidad de ropa que le pone al bebe de día y de noche, de acuerdo al calor o frío que usted misma siente. Si hace frío coloque más ropa, si hace calor retírela. Si a usted le provoca bañarse más veces de lo acostumbrado por el exceso de calor, a su bebe también le conviene. Si el bebe suda en el cuello es que está sobreabrigado. El sudor y calor persistente le puede llevar a la aparición "brotes" en la piel.  

Vestir a un bebé recién nacido es una tarea que debe hacerse con la mayor dedicación. Ya sea que lo hagamos después del baño o al cambiar el pañal, es un momento muy especial de contacto con el bebé, ideal para darle un masaje e interactuar juntos.

Sin embargo, lo que debería ser un momento agradable en ocasiones se vuelve todo lo contrario pues a la mayoría de los bebés no les causa demasiada gracia que los desnuden. Muchos lloran por el estrés que les provoca ser manipulados para vestirlos. Se muestran quejosos e inquietos. Para que la hora de vestirlos no sea un sufrimiento para el bebé ni para la persona que lo hace, debemos tener muy en cuenta los siguientes consejos:
  • Para vestirlo, el bebé debe estar acostado boca arriba sobre una superficie firme pero no dura ni fría. Procura usar una colchoneta para que esté cómodo, si es de plástico es preferible cubrirla con una toalla que no nos importe que se manche. Por supuesto, no se debe dejar ni un segundo al pequeño sólo encima del cambiador.
  • Tener todo a mano: la rapidez es imprescindible. No podemos dejar al bebé desatendido y enfriándose mientras vamos a buscar la ropa. La muda debe estar preparada antes de comenzar a desvestir al bebé.
  • Manipularle con suavidad. No darle la vuelta de forma brusca, ni sacudirlo para colocarle la ropa. Los movimientos deben ser seguros y siempre tener en cuenta que el bebé pequeñito todavía no es capaz de sostener su cabeza.
  • El bebé detesta que le cubran la cara. Por eso, al colocarle o quitarle la ropa por la cabeza estirar el cuello de la prenda y colocarla con una mano mientras con la otra sujetamos su cabecita.
  • Colocar las mangas suele complicarnos hasta que cogemos experiencia. Pero la técnica es muy sencilla: en lugar de poner el brazo en la manga, tenemos que colocar la manga en el brazo. Es decir, pasar nuestra mano por la manga al revés, coger el puño del bebé y hacerlo atravesar la manga. Nunca tires ni empujes sus brazos.
  • Es muy frecuente saltearse alguno de los cierres automáticos. Para evitarlo hay que comenzar a abrochar desde los tobillos hacia arriba, primero una pierna y después la otra.
Hay que evitar que el bebé se enfríe cuando lo vestimos. Los primeros días todavía no regulan adecuadamente la temperatura corporal, por lo que es peligroso que pierdan calor. La temperatura de la habitación debe ser agradable. Una temperatura que favorezca el relajamiento. Lo ideal es alrededor de 24 o 25 grados. Por otro lado, tampoco es bueno el exceso de calor, es importante no abrigarle demasiado.
  • Debe ser holgada, que le permitan libertad de movimientos
  • Prendas de algodón de fibras naturales para minimizar las irritaciones y alergias.
  • Evitar tejidos sintéticos y lana
  • No vestirle con prendas con cadenas o cintas y nunca colocarle imperdibles.
  • Preferir prendas que se abran por delante
  • Preferir prendas que no suelten pelo
  • No lavar la ropa del bebé con detergentes fuertes ni aplicar suavizante pues pueden causar reacción alérgica o irritaciones en la piel.
  • Evitar cremalleras en la cintura, preferir las cinturas elásticas
  • Cuando son recién nacidos elegir pijamas con pie y posteriormente mejor mamelucos o bodies a camisetas.
  • Cortar las etiquetas, especialmente las de la ropa interior

BIBLIOGRAFIA Y ENLACES RECOMENDADOS